
Foto de Scott Dalton. Muy recomendable 'Macondo: Journeys in Garcia Marquez's Colombia'
Hoy un par de recomendaciones rápidas:
EL LENGUAJE COMO UN ARMA
(http://blogs.publico.es/dominiopublico/1396/el-lenguaje-como-arma/)
EL PAPA YA SABE QUIEN ES EL CULPABLE DE LA CRISIS
(http://www.manolosaco.com/1533/el-papa-ya-sabe-quien-es-el-culpable-de-la-crisis/)
Del segundo destacar un par de párrafos sin desperdicio:
“Nunca olvidaré la imagen de aquel Papa [Juan Pablo II], apoyándose para besar la tumba del obispo Romero de El Salvador, el obispo de los pobres asesinado por un escuadrón de la muerte de la extrema derecha terrateniente, mientras en su muñeca brillaba el reflejo hiriente de un Rolex de oro.
Es la bendición más sibilina que se me puede ocurrir: una mano volandera que bendice a los pobres, mientras va dibujando en el aire la señal de la cruz, acompañada del esplendor de una anillo de oro en un dedo y un rolex, también de oro, en la muñeca. ¿Para qué querrán tanto reloj si tienen parada la hora en la Edad Media?”
“Hace un día muy bonito; demasiado bonito para que los animales se estén volviendo locos”. Así rezaba Annie Hayworth la profesora de “Los Pájaros” el relato de Dafne du Maurier que llevó al cine Alfred Hitchcock.
En la memoria de todos está este relato de ficción en el que los pájaros, sin motivo aparente, inician una angustiante venganza contra la raza humana.
Pero, ¿estamos ante un supuesto que queda exclusivamente en el campo de la ficción? Parece ser que no. Un estudio reciente realizado en la Universidad de Florida ha obtenido resultados aterradores, que harían las delicias tanto de Du Maurier como de Hitchcock si estos se levantasen de la tumba.
Los alumnos de la mencionada universidad han podido observar como una especie concreta de aves son capaces de una venganza similar en parte a la literaria/cinematográfica, y si cabe más aterradora pues puede ser selectiva.
La especie en concreto el Mimus Polyglottos, conocido vulgarmente en el sur de los EEUU como “sinsonte”. El estudio consiste en poner a pasear por un parque a diversos individuos; unos de ellos molestan a las crías de los sinsontes en sus nidos y otros no. Este acto se repite varias veces, pero, los individuos se visten en cada ocasión con ropas diferentes. Los resultados son que a partir de la tercera vez los sinsontes adultos atacan a los individuos que molestan a las crías antes de acercarse si quiera a los nidos, y a pesar de ir vestidos de forma distinta. En definitiva, el sinsonte no sólo tiene memoria inmediata clara, sino capacidad para diferenciar a distintos individuos. Como decía el medio donde leí la noticia, nosotros les vemos a todos igual pero ellos a nosotros no.
La naturaleza se nos presenta cada vez más como algo ya no sólo fascinante sino a la vez aterrador. ¿Hasta cuando aguantará la naturaleza antes de poner en marcha un gran plan de venganza contra la humanidad? Ahora que está tan de moda buscar vida inteligente en otros planetas y galaxias, deberíamos prestar más caso a las otras vidas inteligentes que habitan nuestro propio planeta y a las que venimos ignorando sistemáticamente desde la noche de los tiempos. En fin sin duda alguna aquí hay materia para una segunda parte de la famosa historia de “Los Pájaros”.
DEDICADO A NIVORG